domingo, 3 de mayo de 2009

EMABARAZO CONSCIENTE


La conexión de la mujer con su escencia es primordial para que logre tener un embarazo del que luego ella pueda contar una historia de esperanza y amor infinito.
Ya en la clase yo Yoga Prenatal, encontrar tu verdadera escencia se convierte en un reto. No sólo porque estas practicando posturas con un bebé dentro de tí, sino porque además el Yoga por sí solo te ayuda a romper mitos sobre lo que una mujer hace por 'lo regular' durante el embarazo o a la hora del parto.

Kundalini Yoga es el yoga de la consciencia, expande tu mente y disuelve obtáculos emocionales o psiquicos, aprendidos durante el recorrido de una vida, enseñados por nuestros familiares, por la cultura o la sociedad en la que se vive. Pero de eso no hay nada negativo, mas bien es parte del reto.
El Yoga Prenatal te invita a vivir un embarazo consciente en cuanto optimiza tu comunicación interna contigo misma y sobre todo con el bebé que llevas dentro.
La mujer suele tener una mente muy rígida con respecto a amarse a sí misma, a ser sensual y autocompasiva, a verse como una Divina Maestra o una verdadera Santa. El movimiento de tu cuerpo y la respiración desbaratan esa rigidez y por ende tu cuerpo será más flexible. Esto te llevará a tener contracciones y dilatación óptimas para el momento en que el bebé tenga que salir a la luz.

Los miedos que se imponen en la sociedad acerca del momento del parto son parte de un círculo vicioso de consumo y depredación al amor de la mujer por sí misma. El dolor es un hecho cuando se da a luz. Es un hecho. La mujer que puede vivir este momento de dolor con supremacía es la que guiará en el mundo a seres de luz cuidadores de nuestros valores. Como toda una perfecta guerrera de luz, su valentía relucirá en su comunicación y capacidad para sanar.

Tu embarazo no es una condición de enfermedad y desvalorización, es un estado de gracia absoluta. Medita en el nombre del Maestro Infinito y vive en radiancia para afrontar tu reto más enaltecido como mujer y proyecta tu parto como la contienda más heróica entre tu alma y tu mente. Tu hijo te lo agradecerá infinitamente.

Sat Nam,
Hari Karm Kaur

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